logro, aún, percibirte
con la fuerza suficiente
para inventar otro abrazo
que será sólo tuyo.
Pero sos, cada vez,
más y más utopía,
musa propia
y realidad ajena,
sólo letras de otro poema.
No hay responsable,
ni culpable en esto.
No sos vos alejándote,
ni yo escapando,
es sólo, sólo, sólo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario