miércoles, 16 de junio de 2010

Si lo digo, es mentira,
Si lo callo, es lo mismo.

En el viento, no existe,
En el espacio, igual.

Puesto en el papel, le falta algo,
Pintado en la pared, también.

No tiene sentido en oídos ajenos,
Nadie más puede entenderlo.

Siempre ha sido tan real,
Que deja de existir.

Entonces su presencia eterna,
Se disfraza de efímera.

Si, claro, es eso,
Lo que oyes sin escuchar.

Desde el principio fue lo mismo,
Lo que ves sin abrir los ojos.

Lo sientes sin siquiera tocarlo
Con un pensamiento fugaz.

Si lo evitas, lo llevas contigo,
Si lo aceptas, se une a ti.