jueves, 14 de marzo de 2013

11-03-2013


Impaciencia en las manos
por sentir el calor de tu cuerpo.
Inquietud en las manos 
por sentir los secretos de tu cuerpo.

Tocarte los extremos, las líneas,
los detalles que dibujan tu silueta.
Tocarte los sueños, los pensamientos,
las ilusiones que te hacen tan real.

Si tan sólo se nos cruzaran los pasos,
tan sólo un instante, un minuto más,
para memorizarte en mis ojos de nuevo
y tenerte en mis letras cuando quiera.

Que la distancia fuera tan poca
y el tiempo fuera tan corto,
que el viento fuera tu voz
y tu voz fuera mi aliento.

Intención en las manos,
intención en los versos,
por tu rostro, tus gestos;
por tu esencia, por ti.

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