martes, 8 de febrero de 2011

Esta tarde parece no ser suficiente,
con la emoción a medias intentando
llenar un abismo, para tomar
con las manos ese rayo de sol
errante y vagabundo.

No es suficiente para acogerlo,
para hacer del pecho su prisión,
de los pensamientos su fuerza,
un gesto como su valor
y de las palabras su libertad.

Simplemente dejó de alcanzar
este momento, tiempo que desaparece
tiempo, minutos terminados,
segundos sin empezar, siempre
convertido en nunca y nada pasa.

Entonces fuerza,
decisión,
dominio voluntario;
movimiento con solución
dramático eficiente.

Es la misma tarde sin medida;
avanza deteniéndose,
acaba sin llegar.
Voz inconsciente que emociona,
mensaje cifrado en brazos de sol.

No hay comentarios:

Publicar un comentario