sábado, 13 de abril de 2013
12-4-2013
No puedo llorarte,
no quiero llorarte,
no sé llorarte.
Le temo tanto al vacío,
a tu ausencia,
al fantasma de tu recuerdo
que me lleva al día
que te fuiste.
Amanecer tras amanecer,
día tras día,
noche tras noche,
sólo pasan,
sólo se van.
Perdona por no ser fuerte
como quisiste que fuera.
Perdona por quebrarme en pedazos,
por no saber aún cómo seguir,
por esconderme en el silencio.
¿Debería? Dirán que sí.
¿Podría? Quizá.
¿Tendría? Tal vez.
El tiempo ya te llora
y yo, yo aún lo guardo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario