Con la agilidad del viento acariciaré los espacios intransitables de ese bello rostro. Con lo escurridizo del agua refrescare las grietas mas escondidas de ese árido pecho. Con la firmeza de la tierra construiré paredes para proteger ese vulnerable cuerpo. Con el poder del fuego fundiré los estorbos para convertirlos en joyas para engalanar esa bella existencia. Por último con la pureza del corazón supliré todas las necesidades de esa inocente sonrisa.